Oficialmente Magíster en Traducción


Y bueno, el 2014 está a la vuelta de la esquina y claramente no puedo dejar ir el año sin la entrada correspondiente a mi graduación del Magíster en Traducción. Después de las dos entradas dedicadas al tema del vestido y las otras tantas al magíster, tesis y defensa en general, hubiera sido un poco el colmo no hacerlo. Eso y que no dejar constancia de un fin de ciclo tan importante sería todo un insulto a mí misma. Con tanta pega por acá y proyectos y actividades de fin de año allá, costó hacerlo bien y con calma, pero aquí vamos.

Podría partir con un latero y muy cliché "porque todo lo que tiene un principio, tiene un final" o redactar una Breve Historia del Magíster en Traducción 2011-2012 (por supuesto ya sabemos lo que pasa cuando algo tiene la palabra "breve" en el título), pero, uno, no es mi estilo; dos, no quiero que a nadie l@ rapte Morfeo por ponerse a leer esto; y tres, para eso ya están Matrix y varias entradas previas. En vez de eso prefiero partir dando las gracias a mi familia por acompañarme durante la ceremonia y celebración posterior. Eso y por no haberme matado durante los dos años (y un semestre de corrección, defensa y empastado de tesis) que duró este proceso académico. Quién haya dicho que yo soy un amor, no se equivoca totalmente, pero claramente nunca me ha visto en mi punto máximo de estrés o frustración (el perfeccionismo es una traicionera arma de doble filo). ¡UF! Ni yo me aguanto durante esos terremotos. Por lo mismo, gracias por quererme a pesar de todo y no llamar a un exorcista o mandarme derechito a la hoguera todas las veces que me lo gané. ¡Y miren que me lo gané con ganas!


Y segundo, ¿por qué no admitir que estoy orgullosa de esto, de mí y de tod@s nosotr@s por haber llegado hasta el final? ¡Felicitaciones a tod@s y cada un@ de nosotr@s chiquill@s! Porque pucha que costó sobrevivir a todos esos informes, presentaciones, pruebas, correcciones, problemas de formato, conversiones de archivo, anteproyectos, corpus, análisis... y varias cosas más que quedan como copucha interna de carrete. Porque más que un montón de gente a la que le tocó estar junta y no le quedó otra, somos un excelente grupo profesional y humano con mucha química a pesar de nuestras diferencias individuales, así que los carretes van a seguir viniendo sí o sí. Realmente ha sido todo un placer compartir y trabajar con ustedes. A tod@s un más que merecido aplauso.



Comentarios

  1. Felicidades Kareen por este gran logro!!! y estas en todo tu derecho de estar orgullosa de ti, todo lo vale :)

    Todo es logro de tu esfuerzo, paciencia, amor por lo que haces y muchas cosas más.... no hay como tener ese carton en las manos y decir "fui capaz".

    Hace rato que no pasaba por aquí, así que te sigo por bloglovin para no perderme ninguna otra entrada :P

    Cariños y felicidades.... feliz año!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por las felicitaciones ^_^ Sí, la verdad es que muy pocas cosas se comparan a ese "fui capaz", más con la cantidad de veces que me bajó la tentación de tirar la toalla, ¡pero se pudo! :3

      Se te echaba de menos por acá y gracias por bloglovin; yo también te tengo :P

      Borrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Blanca Nieves... ¿Tres más?

Mi nombre es Hor

¡Cáspitas, rayos y centellas!